Irreconocible en su juego, falto de ideas y, peor aún, presa de las ansias y desesperación estuvo Unión Liucura el pasado sábado 19 cuando como local enfrentó a Miraflores de Longaví, por la ida de los cuartos de final de la copa regional de clubes campeones para mayores de 45 años.
Apenas empezó el cotejo se notó que la jornada se venía dura para el anfitrión, que debió echar mano casi por completo a elementos de casa ante una serie de ausencias por parte de refuerzos importantes que venían brillando en los partidos previos.
Se vio entonces en la obligación de improvisar en algunos puestos clave, aunque sin dar con el objetivo porque al poco andar la visita ya se creaba las mayores y mejores ocasiones de gol merced a un excelente juego colectivo, la agudeza y velocidad de sus volantes y delanteros y la confianza que infunde un seguro portero, Hernán Loyola.
Y claro, la resistencia azul duró hasta el minuto 20 de la primera parte, cuando su zaga poco y nada pudo hacer para frenar la veloz arremetida del ágil puntero longaviano, José Retamal, quien incluso se dio maña para enfrentar cara a cara al meta Manuel “Moncho” Pérez y timbrar cómodamente la apertura de la cuenta.
De ahí en más vinieron las lesiones y los cambios obligados en Liucura, con las notorias salidas del defensa Leonel Sánchez y el volante Óscar Ortega, cuyos reemplazantes no pudieron suplir el nivel que acostumbran a exhibir los titulares.
Para colmos, sobre los ‘16 del complemento vino la expulsión de un iracundo Rodolfo González contra el dueño de casa, sanción correcta considerando que el infractor se tramó en una discusión tan absurda como evitable con el juez central y que terminó por mandarlo antes de tiempo a la ducha.
Y si Miraflores ya venía mereciendo el triunfo, se convenció aún más de aquello y metió el acelerador a fondo al tener un hombre más en cancha y ver cómo su rival bajaba los brazos antes de tiempo. Afortunadamente el meta “Moncho” Pérez estuvo soberbio para mandar en dos ocasiones el balón al córner, evitando una diferencia aún mayor y quizás irremontable de cara a la revancha que se disputará este sábado 26 de octubre a las 18:00 horas en el sector rural de Miraflores, comuna de Longaví.
Quien gane esta llave deberá enfrentar en semifinales (revise abajo todas las parejas) al CD Perales de la Asociación Villa Alegre, verdugo de su vecino CD Esperanza a quien derrotó por 3 a 1 en la ida como local, para luego igualar a dos tantos en el pleito final.
Semifinales Zona Norte (2 y 3 de noviembre)
- Pangue Abajo (San Rafael) v/s 21 de Mayo (Curicó)
- Aurora de Chile (Talca) v/s U. Lo Figueroa (Pencahue)
Semifinales Zona Sur (2 y 3 de noviembre)
- Unión Colbún (Linares) v/s Atlético Comercio (San Agustín)
- Perales (Villa Alegre) v/s Ganador Liucura – Miraflores